miércoles, 16 de enero de 2013

martes, 15 de enero de 2013

Obama: Buen mensaje, mala transmisión.


Si por algo se caracterizan los americanos es por mediatizar al máximo cualquier evento relevante para ellos, y si el evento son unas elecciones presidenciales, el asunto alcanza magnitudes bíblicas.

Es por ello que los gabinetes de comunicación estadounidenses saben de la importancia de transmitir el mensaje perfecto en dichas campañas presidenciales, ya que gran parte del éxito o fracaso de un candidato tiene que ver con la imagen que los votantes perciben de él.

De este modo, crear una frase, una idea, unos colores o cualquier elemento significativo con el que pueda ser recordado por el elector adquiere una relevancia superior.

Tomando como ejemplo al Partido Demócrata del actual presidente, Barack Obama, éste alcanzó el éxito en su anterior campaña con el famoso “Yes We Can”. Esta frase se internacionalizó, se consiguió llegar a los públicos, encarnaba lo que el partido quería transmitir, la imagen que pretendía proyectar al exterior. Finalmente Obama consiguió proclamarse vencedor en las elecciones y ser el primer presidente de color de los Estados Unidos de América. Casi Nada

Para su siguiente campaña, la de la consolidación, los demócratas apostaron por el siguiente cartel:



Forward.” o adelante en castellano ,es la idea que se pretendía transmitir, la idea de progreso en un marco económico y social difícil, la idea de dejar atrás la crisis y salir reforzados de ella.
¿Pero refleja este cartel la idea descrita anteriormente? Si nos paramos a analizarlo, ¿están todos los elementos en relación con lo que pretendemos infundir? Claramente NO.

Principalmente por los colores elegidos para la campaña. El negro, qué color tan alegre y optimista, sin duda el más indicado para transmitir confianza. Si el futuro va a ser tan negro como este cartel, los votantes de Obama deberían de sentirse orgullosos.

Evidentemente, este color no conecta para nada con la idea que se pretendía proyectar, y es un claro ejemplo de cómo una empresa puede ser puntera en su actividad, pero que si no se presenta como es debido y si no refleja en su imagen externa lo que en realidad pretende reflejar, el público acaba por no tomarla en serio y no confiar en ella.

Por suerte para ellos, el error se detectó a tiempo, y la campaña de Obama adquirió otros mimbres. Aquí el cartel número 2:



Ahora el cartel empieza a significar lo que el partido deseaba. El negro se sustituye por un azul cielo, que transmite más calma y sin duda se asemeja más a la percepción de un futuro mejor. Además, se encuadra en un marco blanco, símbolo de la pureza y la valentía. Sin embargo, aún encontramos un elemento que sigue chocando, y no es otro que el punto final.

Por un lado tienes “adelante”, pero el adelante es frenado por un punto. ¿Hasta cuando dura ese adelante?, ¿se puede confiar en algo que tiene final?


El mensaje seguía siendo fuerte, pero su transmisión cojeaba. Es por ello que se decidió dar un último impulso al cartel, modificando un pequeño elemento que a su vez lo cambiaba todo:




Ahora si que existía coherencia y conexión entre el mensaje y su estética. El punto da paso a la exclamación. La pausa da paso a la acción. El mensaje ganaba fuerza y garra y de paso también se convierte en un mensaje de ánimo, una manera de decir que hay que estar preparados para lo que llegue y que la pasividad no es una opción.

De este modo, se comprueba cómo la imagen corporativa del partido sufrió modificaciones estéticas que en su conjunto cambiaban el mensaje del mismo. Así, queda comprobado que la percepción engloba más aspectos a tener en cuenta que una simple frase, y que lo que la rodea es tan importante como lo demás.

No se sabe hasta que punto modificó la percepción por parte de los votantes los cambios en el cartel de la campaña, pero si sabemos el final de esta historia:


Nueva Democracia, del descalabro al esperpento.


Año 2008. El presidente del gobierno griego, Kostas Karamanlis, anuncia la deuda pública del país heleno, valorada en un déficit del 3,4 porciento.

Su partido político, Nueva Democracia, de ideología centro-derecha, ha depositado gran parte de su inversión en mercados de ``dudosa´´ rentabilidad, como la compra de armamento y equipamiento bélico tanto a Francia como a Alemania. ¿Adulación? Se muestran de cara al extranjero como un país solvente, con un importante peso en el sector servicios, y miembro consolidado de la Unión Europea. En Europa nadie sospecha que lo que en realidad sucede allí provocará una hecatombe en la eurozona.

Y es que Gracia se dedicó a falsear cuentas de cara a Bruselas, mediante arquitectura financiera tapó hoyos, bueno, cráteres, y presentó una deuda pública cuatro veces menor de lo que en realidad era.

Emitir deuda en monedas ajenas al euro como el yen, o negociar con mega bancos de inversión como el Goldman Sachs le bastó al gobierno de Atenas para que en la Unión nadie se percatara de su trampa. Tras las elecciones del año 2009 en las que a causa de la crisis Nueva Democracia obtuvo su peor resultado en unas elecciones al parlamento griego, el socialista Yorgos Papandreu tomó el relevo como primer ministro. Poco después, su gobierno denunció el falseamiento de cuentas del antiguo mandatario y explicó que Nueva Democracia no sólo se gastó una buena parte de su PIB en negocios inútiles, si no que Kostas Karamanlis había ocultado que el déficit de deuda pública ascendía al 12,7 porciento, una cifra alarmante.

Tras esto, los mercados se le echaron encima. Un partido político había cambiado la imagen de un país, había echo perder toda la credibilidad internacional, y había condenado a su pueblo a años de restricciones, recortes y ajustes que pronto traerían reacción por parte de la gente. Creció la inestabilidad, las protestas, manifestaciones, suicidios delante del parlamento…

Una actuación tan sumamente incompetente debería ser motivo para la extinción de un partido político.
El 1 de noviembre de 2011 se cesa a la cúpula parlamentaria por temor a un Golpe de Estado. Además, el 11 de noviembre y tras la petición fallida del un referéndum sobre la re-financiación de la deuda griega, dimite Yorgos Papandreu y se pone en su lugar el tecnócrata Lucas Papademos.
El domingo 12 de febrero de 2012 se reunió el parlamento griego para aprobar el enésimo plan de ajuste que supondría un enorme recorte en los salarios públicos y en las cuentas del Estado para pagar la enorme deuda contraída. La decisión se tomó bajo una enorme presión ciudadana y extranjera. La negativa a aplicar el acuerdo implicaría la salida de Grecia del euro.

En Grecia y en Europa sabían de la importancia de que el partido Nueva Democracia no desapareciese, ya que la oposición era más tajante y demandaría la salida de los griegos de la U.E, lo que la desestabilizaría a corto plazo y le haría perder credibilidad en el panorama mundial.

De este modo, Nueva Democracia sufrió un lavado de cara. Karamanlis dio paso a Antonis Samaras. Tras este cambio, el partido lavó su percepción de cara al público, y logro ganar votos con sus promesas de ajustes menos severos. Pese a todo, seguía siendo un partido pro-rescate, lo que le daba credibilidad de cara a la eurozona, aunque sembraba dudas entre los votantes.

En un plazo de 3 años, Nueva Democracia pasó de ser uno de los partidos con peor valoración en Grecia, a formar gobierno de coalición y volver a tomar las riendas del país.
Claro está, esto no hubiese sido posible sin el apoyo de la U.E, que hizo una campaña muy agresiva reforzando la imagen del partido.

Actualmente, Grecia es un país muy inestable políticamente hablando, pero por suerte para la economía europea, en las últimas elecciones ganaron los partidos a favor de permanecer en la Unión Europea. Un resultado adverso podría haber desencadenado un efecto dominó que hubiera amenazado seriamente con la desaparición de la moneda única europea.

Una tragedia con miras a ser tendencia


El pasado viernes, el mundo quedó sobrecogido con una noticia que estremeció a todos. Un joven de 20 años entró en un colegio armado nada más y nada menos que con un rifle de asalto automático y dos pistolas semiautomáticas, y asesinó a 26 personas. La mayoría fueron niños de entre 4 y 10 años, y 6 profesoras que trataron de proteger a sus alumnos, entre las que se encontraba la madre del asesino.

En ocasiones, la realidad supera a la ficción, y esta es una de ellas. Como alguien puede tener la sangre fría de matar a 26 personas, como puede alguien llegar a planearlo, tan siquiera a imaginarlo de verdad… Pero analizando los hechos, llama la atención un detalle. El chico utilizó armas que su madre tenia en casa, ni las robó, ni las compró él. ¿Qué hace una profesora de primaria con un rifle de asalto y dos pistolas en su casa? E aquí un debate que ya sobrepasa los límites de la lógica.

En Estados Unidos, las armas se ven como una parte fundamental de su cultura, no en vano son un derecho constitucional, y en muchos estados basta con estampar tu firma, un carnet de conducir y tener 21 años para poder comprar una. De hecho, en algunos bancos te regalan un rifle solo por domiciliar tu nómina. Esto significa que casi cualquiera puede poseer una, ya sea un psicópata, un asesino, o simplemente alguien frustrado que planea una masacre…

Tras el terrible suceso, el presidente Obama habló entre lágrimas de lo ocurrido, diciendo que ya ha sucedido demasiadas veces, y que se deberán tomar medidas.

De este modo, aventura que el partido demócrata va a iniciar trámites legales para cambiar la legislación de la venta de armas. Sin embargo, y pese a ser el presidente, cabe recordar que el parlamento esta formado en su mayoría por republicanos, partidarios de la venta de armas (no en vano, el lobby armamentístico dona más de cinco millones de dólares para campañas de dichos parlamentarios), por lo que no se aventura tarea fácil. Y más escuchando las declaraciones de un senador republicano de Texas, que afirmó que “la catástrofe podría haberse evitado si la directora o algunos profesores hubieran tenido un arma de fuego a su alcance para abatir al chico”.

El partido demócrata esta en jaque, ya que muchos piden a gritos que se erradique la venta de armas de fuego, mientras que otros lo considerarían como una violación a la segunda enmienda de la constitución. Obama debe reaccionar, pero es difícil en un país en el que desde pequeños se les enseña a los niños que las armas forman parte de la vida cotidiana. ¿Puede enfrentarse un presidente a un lobby gigantesco, a grupos de presión con poderes casi ilimitados, y a una ciudadanía que pese a todas las tragedias sigue dividida?

El de la casa blanca ya ha anunciado algunas medidas, como la de regular la venta de armas de gran calibre y automáticas. Es un comienzo. Un arma como defensa personal parece algo excesivo, pero si encima ese arma es una herramienta de guerra, creada para el campo de batalla como el rifle que utilizó el asesino, la cosa adquiere mimbres surrealistas.

Si Obama consigue modificar las leyes de estados pro-armas, si consigue apoyo del congreso, y si convence a una parte de la ciudadanía de que se debe ser más tajante con respecto a las armas, tiene una oportunidad tremenda para salir reforzadísimo de una situación que se presenta muy adversa, pero que puede ser de ayuda en el futuro. El tiempo dirá como se desarrolla el asunto, pero todos conocemos la determinación del presidente.

Tocado y hundido: Rubalcaba liquida la cordura que le quedaba al PSOE.



La obsesión del líder del PSOE por deshacerse de las cadenas de la gestión de José Luis Rodríguez Zapatero es tal que este martes sacrificó la poca coherencia política que le quedaba. 

Por una parte, posicionándose en contra de la reforma laboral del anterior Gobierno socialista, del que él fue vicepresidente. Por la otra, anunciado la presentación de un recurso ante el Tribunal Constitucional contra la decisión de Mariano Rajoy de no revalorizar las pensiones, obviando que en mayo de 2010 Zapatero las congeló.

El esperpento fue tal que, por los pasillos de la Cámara Baja, varios diputados socialistas se lamentaban de la imagen dada. No en vano, el PSOE, no tuvo empacho en votar a favor de la toma en consideración de una iniciativa legislativa popular impulsada por los sindicatos y contraria a la reforma laboral de Zapatero, la que en septiembre de 2010 motivó la primera y única huelga general de sus dos legislaturas (actualmente ya derogada).


Las explicaciones dadas por el PSOE durante el debate parlamentario fueron aún peores, puesto que la diputada socialista Concha Gutiérrez del Castillo peló a la "coherencia democrática". Para los populares, por contra, no era tal sino "hipocresía política".

López Aguilar: "PSOE debe refrescar su imagen"

Imágenes y declaraciones del jefe de los socialistas españoles en el Parlamento Europeo, Juan Fernando López Aguilar, quien cree que tras las derrotas electorales en Galicia y el País Vasco el PSOE tiene que "movilizar" sus "mejores recursos" y sus mejores personas, "refrescar" su imagen y su mensaje y, sobre todo, reafirmar su "compromiso firme" con los valores socialistas.

El PP, muy lejos ya de la mayoría absoluta que consiguió gracias a sus promesas de empleo.


El 53,3% de los españoles tiene una mala imagen de Rajoy y todos sus ministros suspenden en valoración, según un sondeo de 'El Mundo'.



El Partido Popular está muy lejos ya de aquella mayoría absoluta con la que premiaron los ciudadanos las promesas de su líder, Mariano Rajoy, de la plenitud del empleo y la salida de la crisis. El entonces líder de la oposición y los suyos aseguraron que sabían cómo superar el bache y los españoles les creyeron.
 Un año después del 20-N, lo único que tienen es más paro, más recesión, menos derechos, sociales y ciudadanos. El resultado en términos electorales es que los ‘populares’ han perdido ocho puntos en intención de votos. Si hoy se celebraran elecciones, obtendrían el 36,7% del escrutinio, frente al 44,6% conseguido en las pasadas elecciones generales, según un sondeo de El Mundo, publicado este domingo.
En este plazo de tiempo, los ciudadanos han sufrido la subida del IVA, recortes imposibles de prever en educación y en sanidad, tasas en Justicia, la no revalorización de las pensiones y en el caso del sector público, recortes de derechos inimaginables en otro tiempo.

Más de la mitad de los ciudadanos, el 53,3%, tiene una imagen mala o muy mala sobre el partido. Sólo el 16,6% de los ciudadanos asegura seguir teniendo en buena consideración al presidente del Gobierno y un escasísimo 2,5% continúa valorándolo muy bien. Sobre el Equipo de Gobierno en su conjunto, casi el 61% de los españoles expresa solo rechazo. Ninguno de los ministros consigue el aprobado.

PARTIDO POPULAR


El PP se da a conocer como un partido democrático de centro reformista teniendo entre sus objetivos el progreso y la cohesión social, la modernización, la solidaridad y la tolerancia así como la igualdad de oportunidades entre las personas. Defiende también la unidad nacional de España y se considera abiertamente a favor del proyecto europeo.

Sus visiones económicas se caracterizan por proponer, dentro de una economía de mercado, una política económica centrada en el ciudadano, el inversor y el emprendedor, mediante reformas que adapten al país a los cambios de un mundo globalizado. También defienden unas administraciones públicas austeras con presupuestos equilibrados.10
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy lo describe como "un partido en el que caben todos, el gran partido del centro y la derecha española". Los miembros más destacados del partido lo sitúan en el centroderecha del espectro político español.

Las siglas del Partido Popular son PP y su logotipo está integrado por las palabras “Partido Popular” cobijadas bajo un símbolo que representa una gaviota con las alas desplegadas.

La imagen estilizada de un ave corona a las dos pes en el logotipo del partido. Dicha imagen es conocida hoy en día como una gaviota muy estilizada, pero en sus orígenes se trataba de un albatros. Fue en el congreso de junio de 2008 cuando los nuevos estatutos cambian la denominación a "gaviota" (Art. 1º, punto 3) seguramente por desconocimiento del propio redactor de los estatutos, ya que hoy en día, el Partido Popular sigue entregando los premios "Albatros de Oro"


CAMBIOS DE LOGOTIPOS EN EL PARTIDO POPULAR



El logotipo del PP ha sufrido grandes cambios.
El cambio de logo está motivado por una nueva imagen que el partido quiere proyectar, mucho más juvenil. Los valores que suele defender este partido político, que pueden sonar más bien a antiguo, y unos principios democráticos muy ligados a una clase social media-alta y un grupo adulto-maduro. El nuevo logo del PP no es más que una consecuencia de la nueva estrategia de comunicación que pretende ampliar la franja de edad, acercarse al público joven, y afirmar que sus valores también pertenecen al presente y sobre todo al futuro.
Es por eso, que el partido político se ha subido al carro de la web 2.0. y, con ello, un logotipo también 2.0. El logo del PP es cuadrado con bordes redondeados. Tiene un borde gris que enmarca el fondo azul, color corporativo del Partido Popular. Es en este fondo donde se da toques de diferentes azules para conseguir cierto volumen. En su interior, las iniciales del partido, que ya han pasado a convertirse en su nombre más común “pepé”. Utiliza una fuente sans serif en cursiva.

 El logotipo del PP también tiene un imagotipo: una gaviota. Estas dos últimas características, la tipografía y el imagotipo, son los que se siguen manteniendo de anteriores logotipos. Como diferencias, la eliminación del color rojo del logo (lógico puesto que su principal oponente ostenta este mismo) y la eliminación del nombre completo: Partido Popular (aunque hay un logo intermedio donde solo estaban las iniciales), entre muchas otras.


Como podemos observar el logotipo actual sigue la misma línea, con intención de parecer moderno y juvenil. Además, se ha presentado el lema que acompañará a la foto de Mariano Rajoy en las vallas publicitarias: "Las ideas claras".

Mantiene su fondo azul y la gaviota sobre las letras PP, aunque con un intento de darle un aire más moderno, recordando a los botones de la web 2.0


                                                                                          Logotipo actual